“La Vida de un Representante”

Unos de los trabajos más pesado que puedas tener, es ser un representante de telemercadeo bilingüe… Ohh dios mío paciencia. Levantarse a las 6 de la mañana con el truño de que vas a ir a trabajar. Te bañas, te cambias y pones tu mejor cara para llegar con una buena actitud. Te paras en la avenida a esperar un carro público, los cuales siempre pasan llenos. El sol se ajusta a tu horario de trabajo para estar más fuerte cuando realmente no lo necesitas, y joderte mientras estas parado en un lugar desolado. Luego llegas al trabajo todo sudado e incomodo para sentarte en un cubículo con tres paredes azules que es lo único que ves mientras estas ahí. Hablando con personas que realmente no te importa como están o si realmente le estas ayudando. El día sentado en esa Jodia silla que cuando me paro ni las nalgas las siento acalambradas y al fin para hablar con una persona que ni un pito le importo y viceversa. Por otra parte te pasas toda la mañana mirando el reloj y calculando cuanto falta para el break, break que solo dura 45 minutos. Ya jarto debido al plato del día, vuelves al mismo cubículo a seguir diciendo lo mismo que dices todos los días hasta doscientas veces. Trabajar en telemercadeo es tedioso, pero trabajar en telemercadeo con Gringos es imposible. Si has pensado en trabajar en algún sitio relacionado con teléfonos, por tu bien no lo hagas. Esto es un consejo que te da una victima de la zona franca del telemercadeo.